¿Por qué ya no caen aerolitos del cielo? (y II)

Y otro tema a reflexionar en torno a esta pregunta es, ¿por qué la gente es capaz de inventar tales farsas por unos minutos de fama? En este caso, muchas personas estrellaron trozos de hielo contra sus coches y tejados para salir treinta segundos en las noticias.

Pero casos de farsantes que quieren popularidad hay varios ejemplos en los últimos años en España:

Bartolomé Rubia, concejal del PP de La Carolina (Jaén), conocido como Bartolín simuló un secuestro de ETA (llegó a decir que lo secuestraron y a punta de pistola lo llevaron en taxi a coger un tren destino a Irún, y nadie se había dado cuenta)

Michael Lowe, decía ser hermano de Rob Lowe y llegó a presentar un programa en Telecinco (hasta que sus supuesto hermano vino a España a promocionar una película)

La selección española de baloncesto de discapacitados mentales que arrasó en las paraolimpiadas del año 2000, sin que ninguno de sus miembros tuviera discapacidad alguna (bueno, al que se le ocurrió la idea quizás si)

Enric Marco, que presidió durante décadas la asociación de españoles víctimas de los campos de concentración nazis, hasta que cuando contaba con 84 años, se descubrió que nunca había pisado uno.

Tania Head, catalana presidenta de la asociación de víctimas del 11-S que, sin embargo, estaba en barcelona el día de los atentados (llegó a inventarse que su novio había muerto en el atentado y ella había salvado su vida de milagro)