Cinema Pipeiro VI (clásicos en blanco y negro)

Me han pedido que recomiende alguna película clásica, pero que sea entretenida, me advierten. Pues dicho y hecho, varias películas clásicas, de grandísimos directores y muy, muy entretenidas, todas en blanco y negro:

El tercer hombre (The Third Man, 1949), dirigida por Carol Reed, destaca en su reparto la presencia de Orson Welles. Trama situada en la Viena de postguerra, thriller en el que el protagonista se ve envuelto en la muerte de un amigo en la que se mezcla espionaje y las mafias del mercado negro.

Anatomía de un asesinato (Anatomy of a Murder, 1959), dirigida por Otto Preminger y protagonizada por James Stewart. Un abogado debe defender a un teniente acusado de matar al violador de su mujer. Una de las primeras películas de juicios, mantiene la tensión todo el tiempo, no se sabe muy bien quien dice la verdad.

Doce hombres sin piedad (Twelve Angry Men, 1957), primera película del aún en activo director Sidney Lumet, protagonizada por Henry Fonda. Película con aire teatral, en un único escenario, y con ritmo casi a tiempo real. Se reune un jurado, en la primera votación once votan culpable. pero uno discrepa.

Arsénico por compasión (Arsenic and Old Lace, 1944), de Frank Capra, protagonizada por Cary Grant. Comedia negra, donde un escritor descubre que sus ancianas tías tienen una relación especial con el arsénico...

El halcón maltés (The Maltese Falcon, 1941), de John Huston, protagonizada por Humphrey Bogart. Cine negro de intriga, donde unos detectives se ven envueltos en crímenes y robos.

Perdición (Double Indemnity, 1944), de Billy Wilder, protagonizada por Barbara Stanwyck. Una trama de un asesinato y timo a una compañía de seguros. Primero el plan, después la investigación.