(segundo premio concurso Boffard día del libro 2011)
Mientras abría un Boffard Reserva escuché como él entraba. Hacía años que no nos hablábamos, en los que ni siquiera nos habíamos visto. Ahora papá había muerto, y por nuestra cabezonería no había podido ver cumplido su sueño de ver que sus hijos volvieran a hablarse.
Mientras empezaba a cortar el queso, intenté recordar por qué habíamos dejado de hablarnos, y la verdad que ni me acordaba. El funeral de esa tarde al menos nos había juntado en la casa familiar, junto a nuestra madre. Pero, ¿hablaríamos? no sabría qué decirle.
En ese momento mi hermano se acercó a mi, y mirándome a los ojos dijo -”¿Boffard Reserva?”
-”El favorito de papá, ¿quieres?”, respondí.
-”Por supuesto, hermano”
viernes, 15 de abril de 2011
(microrrelato) Mi hermano
Etiquetas: microrrelato
Y ésto lo ha escrito... O Pipeiro
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3 comentarios:
Que tierno, que bonito y que quesero eres, todo se soluciona con un poquito de queso en la vida.
Me saltan las lágrimas pensando en ese queso...que bien va a acompañar a las estrella galicia en el Madrid-Barsa...
qué bonito! me encanta... y el queso también! ;-)
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