Hacía años que yo no tenía un vestido nuevo, como cualquier trasto que estorba estaba tirada en aquella esquina, viendo todos los días como ella se probaba ropa y más ropa... Hacía tiempo que ya nadie me hacía caso.
Al menos me consolaba pensar que era la única de mis compañeras a la que aún dejaban seguir viviendo en casa; por algo había sido durante tantos años de su niñez su muñeca favorita...
sábado, 19 de diciembre de 2009
(microrrelato) sin vestido nuevo
Etiquetas: microrrelato
Y ésto lo ha escrito... O pipeiro
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario