A voltas co entroido

Quedan sólo dos semanas para lleguen los carnavales. ¿Debo disfrazarme? Hace muchos años solía disfrazarme, pero con el tiempo perdí el interés por ello. Ahora bien, reconozco que de no ser por la gente que sale por la mañana , por la tarde y por la noche disfrazada, los carnavales desaparecerían, que aun gustándote o no son unas fiestas de gran tradición (y paganas, aunque la iglesia quiera conferirle orígenes pseudoreligiosos).

Ahora bien, sin desprender ese odio hacia los carnavales del autor del anterior post, el disfrazarme me da mucha pereza, me parece incómodo y no encuentro diferencia a cómo me lo paso saliendo con o sin disfraz (aparte de dicha incomodidad). Pero supongo que algún año daré una sorpresa y volveré a la senda del entroido. Mientras me entretengo escuchando los planes de mis amigos para disfrazarse; incluso uno de ellos está ya, varias semanas antes, preparándose la barba para la caracterización (ahora tiene una perilla al más puro estilo amargureiro1), ¿adivináis quien?